Significado Espiritual de la Piedra Luna y sus Propiedades

El nombre de esta piedra preciosa se relaciona con el brillo de la Luna. Sus tonalidades y destellos transmiten magnetismo, misterio y magia. Sin duda, la energía de esta piedra es muy especial.

Conocida también como Adularia, Ojo de Pez u Ojo de Lobo, es una piedra extraída de yacimientos naturales. Se caracteriza por su bonito color blanquecino y por sus reflejos azulados iridiscentes.

Las propiedades de la Piedra Luna se encuentran asociadas a los cambios de ciclo que experimenta el cuerpo femenino, por ejemplo: la menstruación, la gestación, el parto, la lactancia, la menopausia, etc. Este mineral se vincula con el equilibrio del sistema hormonal, aportando estabilidad y beneficios a las diferentes etapas que sufre el cuerpo.  

Además, también se relaciona con el control de los desajustes emocionales, esta piedra natural favorece el encuentro de la calma y la relajación,  para todas aquellas mujeres que sufren momentos de inestabilidad o mayor sensibilidad. 

Se encuentra en pequeñas cantidades y en zonas muy dispersas a nivel mundial como son Sri Lanka, India, Alpes austríacos, Birmania, Noruega, Amazonia brasileña, México, Polonia, Australia, Estados Unidos y Madagascar, esta dificultad le atribuye un significado esotérico y propiedades mágicas, teniendo la consideración de talismán.

Es asociada a la diosa Diana y a otras deidades relacionadas con la Luna, de ahí la explicación mística de que tenga ese aspecto tan parecido. Además, es un símbolo de la religión neopagana de primera mitad del siglo XX en Inglaterra denominada wicca, la cual tiene vínculos con diversas religiones antiguas e incluso con la brujería. En ella se usan joyas elaboradas a base de plata y piedra de luna para la realización de sus rituales.

Se le atribuyen diversas propiedades esotéricas, como son la potenciación de la fertilidad y la ayuda para tener un buen parto; atraer el amor; protección de los viajeros; atraer la buena suerte y las vibraciones positivas; liberación de las malas energías; protección sobre malos pensamientos y deseos; ayuda para encontrar el equilibrio en la vida y otras muchas.

Según estas creencias en las que se basa, no siempre tiene la misma efectividad, de hecho, esta depende de la fase lunar en la que se use. Suele ser más efectiva en cuarto creciente y luna llena, y menos en cuarto menguante.