Yin y Yang significado espiritual

Yin Yang es un principio filosófico y religioso que explica la existencia de dos fuerzas opuestas pero complementarias que son esenciales en el universo: el yin, asociado a lo femenino, la oscuridad, la pasividad y la tierra; y el yang, vinculado a lo masculino, la luz, lo activo y el cielo.

El símbolo Yin-yang presenta un círculo con dos partes en forma de S, una blanca y otra negra.

Este símbolo hace alusión al equilibrio de fuerzas. En términos sencillos podríamos decir que en todo lo bueno hay algo de malo y en todo lo malo hay una parte de bondad.

Este símbolo es sumamente utilizado en el feng shui por todas sus cualidades y su significado energético. La práctica del Feng Shui busca el equilibrio y la armonía dentro de los hogares o espacios, por lo que el yin-yang es de suma importancia. Sin embargo, muchas personas lo relacionan con otros significados, por ejemplo al hablar de la luz y el Sol, o de la relación hombre-mujer. Pero estas definiciones son erróneas, ya que en el taoísmo todo se resume a la existencia de energía positiva y negativa.

Utilizado por muchas personas, instituciones y organizaciones, el yin-yang tiene un significado oculto. Es la conexión entre el cuerpo y mente, una unión de fuerzas y energías complementarias, lo femenino y lo masculino. Es el equilibrio entre lo bueno y lo malo; es decir, el entendimiento de que en todo lo bueno hay algo malo y en todo lo malo hay algo bueno. Es una ideología de vida, cultura y religión.

La energía femenina contiene suavidad, pasividad y la noche; esta es representada con el yin. Mientras que la energía masculina contiene lo activo, la dureza y el día; representada por el yang. Este símbolo nos expresa la unión de dos energías, la espiritual y la física. Un círculo divido en dos, una parte blanca y una negra, con un punto en cada una de sus partes del color contrario.

También tiene un significado para el Amor. El símbolo Yin Yang afirma que los opuestos son atraídos entre sí. Cuando aparece en tu vida esa persona que estabas esperando la consideras tu media naranja, tu enamorado, tu alma gemela, tu pareja, tu amor.

La filosofía china Yin Yang reparte la energía Chi de forma equilibrada y opuesta. Una mitad es femenina y la otra es masculina, pero esto no se refiere a que la electricidad femenina tiene que pertenecer a una mujer y el poder masculino deba ser de un hombre, si no que un ser humano tiene que ser una energía provechosa de ambas energías. La presencia positiva y negativa del Yin y el Yang encarnan el anhelo de una relación estabilizada.

Cualidades de la energía Yang masculina:

Una persona Yang dispone de un elevado grado de vitalidad y se encuentra continuamente en actividad. La electricidad Yang necesita de la energía Yin para no volverse molesto ya que le concede una atención reparadora. El poder Yang en exceso hace que la persona sea colérica e irritable. De forma instintiva los hombres se asemejan a las características de la mitad Yang enfocado al razonamiento y al pensamiento, analizan la situación con el uso de su lógica a la hora de tomar decisiones en problemas concretos. Un hombre usa su intelecto masculino consiguiendo buenas ideas e investigando sobre el tema que le preocupa para resolver conflictos. Sabe que el que la sigue la consigue, a través de su voluntad y empeño, lo que marcará la diferencia del éxito y el fracaso. Cada vez que gane la batalla conseguirá autoridad para motivar a otros lo que le empujara a aprender a valorar el ego masculino. En cuestiones de pareja tendrá tendencia de líder.

Características de la energía Yin femenina:

La corriente Yin destaca por una conducta impasible, calmada y tranquila ante situaciones sociales, muestra una conducta dinámica hacia la existencia. Una persona Yin es una persona precavida que goza de la soledad y de un entorno de paz, se complacen de originar un hogar y la estabilidad de una familia. De forma natural las mujeres empatizan con los atributos de Yin basados en la sensibilidad e intuición. Una mujer busca el entendimiento total de una situación antes de juzgarla. Presiente las señales que la rodean, medita sobre ellas y asienta sus resoluciones en presentimientos. Ella valorizará el amor y lo que ello conlleva junto con el apoyo moral por encima de lograr sus propios intereses. A medida que madure intelectualmente confiará más en su palpito y su misericordia ya que cree en la validez de su perspicacia y ve que el amor compasivo será lo que de sentido a su vida y con lo que alcanzará sus deseos. En su noviazgo será ella la que aporte el sentido vislumbrante y respaldo con amor.